Cómo abrir la mente (y el corazón) de tus clientes sin presionar Voy a contarte algo que a mí me cambió la forma de vender para siempre: a veces la mejor forma de vender no es hablar… sino preguntar. Sí, preguntar. Porque cuando haces una buena pregunta, no estás empujando, estás abriendo. Estás invitando al