TU FORMA DE HABLAR VENDE O ESPANTA

ARTÍCULO: Tu forma de hablar vende o espanta

Frases que te cierran puertas con el cliente (y cómo cambiarlas)

Te cuento algo que aprendí observando a muchos emprendedores en Philly:
💬 A veces no pierdes una venta por el producto…
La pierdes por cómo lo ofreces.

Hay frases que sin querer suenan agresivas, apáticas o simplemente mal.
Y lo peor es que muchas veces no nos damos cuenta. Las decimos porque las escuchamos toda la vida, o porque nadie nos enseñó otra forma.

Pero cuando cambias las palabras… cambia todo.

1. ¿Cómo te estás expresando?

No es solo lo que dices, sino cómo lo dices.
¿Hablas con amabilidad? ¿Con claridad? ¿Con energía?
¿O usas frases que suenan como excusas, presión o desinterés?

Aquí te dejo algunos ejemplos reales de negocios pequeños en Filadelfia que he escuchado en conversaciones con clientes:

2. Frases que espantan a los clientes (y cómo cambiarlas)

❌ Malas frases ✅ Alternativas que venden
“Eso no se puede” “Déjame ver cómo te puedo ayudar”
“Es lo que hay” “Te explico lo que incluye y vemos si se ajusta”
“Está en el precio, no puedo hacer nada” “Puedo explicarte por qué vale lo que vale”
“No sé, yo solo trabajo aquí” “Voy a buscar esa info y te la doy en un minuto”
“Así lo hacemos siempre” “¿Te gustaría que lo adaptemos a lo que necesitas?”

🔸 Ejemplo real:
En una tienda de regalos en el sur de Philly, una clienta preguntó si podían envolver el producto para regalo.
Respuesta: “No hacemos eso”. Resultado: mala cara y adiós.
Lo ideal habría sido: “No solemos hacerlo, pero déjame ver si puedo ayudarte con algo bonito y sencillo”.

3. El tono también cuenta

No solo las palabras.
Si lo dices con prisa, sin mirar a los ojos, o con un tono cortante… aunque la frase sea buena, el cliente lo siente.

🧠 Consejo: Imagina que le hablas a alguien que aprecias.
¿Le hablarías con mala cara? ¿Le cortarías? ¿Le dirías “es lo que hay”?

4. Usa frases que abren puertas

🎯 Practica decir cosas como:

  • “¿Cómo te puedo ayudar hoy?”
  • “¿Quieres que te muestre una opción similar?”
  • “Te entiendo, yo también valoro mucho eso”
  • “Puedo explicarte cómo sacarle más provecho a esto”

Esas frases generan confianza, cercanía y deseo de quedarse… y comprar.

5. Y tú, ¿cómo suenas?

Hazte estas 3 preguntas:

  1. ¿Uso frases negativas sin darme cuenta?
  2. ¿Explico o me justifico?
  3. ¿Cierro conversaciones… o abro posibilidades?

Cambiar la forma en que hablas con tus clientes no requiere grandes inversiones, pero sí un cambio de mirada. Porque cada palabra que usas puede acercar… o alejar.
Si crees que tú —o tu equipo— podrían mejorar la manera en que se comunican, podemos ayudarte a identificar esas frases que espantan y transformarlas en mensajes que conectan, convencen y venden.
¿Hablamos?

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